Las 7'00, suena una canción... un ratito más en la cama! 7'15...7'30.... ahora sí! Me gusta el sabor de las galletas mojadas en leche caliente,tan caliente que casí arde. Acompañado siempre de un frío zumo de naranja.Es el mejor momento. Las 7'50! a la ducha, no hay nada que siente mejor... me gusta ir a trabajar con colores alegres,no sé si realmente influye en algo o no, pero si voy a atender a gente con vidas "sin luz",ir de negro o cualquier otro color oscuro daría un toque más de tristeza...pequeñas manías.
La tarjeta,el móvil,las llaves, la libreta (o Diario de Campo)... de camino a la parada la música a tope..según la canción, mi día empezaría de una manera u otra...comprobado. Recuerdo aquellos hermanos pequeños,esperaban su autobús,él siempre llegaba cantando y saludándonos a todos los que esperábamos,ojos azules y piel clarita, como su hermana. Vestía con su uniforme,sus medias verdes hasta las rodillas,hiciese el frío que hiciese (nunca entendí esas normas). Cuando ellos se iban sabía que el 5 estaba a punto de llegar.... tras las paradas de Juan Florez,dónde se subían esos chicos universitarios que siempre hablaban de exámenes,de salir,de este profesor,del otro... llegábamos a San Pedro de Mezonzo, dónde se subía un niño gordito, un gamberrillo que hacía que tocaba la trompeta, o que tarareaba el "chu-cu-chu" del tren... era un bichillo que cuando le acompañaba su madre,se abrazaba a ella y no necesitaba cantar,ni gritar,ni llorar...sólo sentir ese momento. Todavía se me escapa una sonrisilla recordándole.
Mi parada! corría hacia el centro por la parte de atrás,sabía que seguramente Smara me estuviese viendo desde la ventana,siempre llegaba apurada. "Holaa!Qué tal?" le decía cada mañana al entrar en el despacho, entonces nos sentábamos y mirábamos quiénes tenían cita hoy... cuantos más atendiese yo mejor!
Todavía recuerdo la primera cita que vi, cómo veía las cosas esos primeros días y cómo las veo ahora. Todavía recuerdo la inseguridad de no estar a la altura de lo que los usuarios necesitaban o esperaban de mi, lo complicado que veía diferenciar las emergencias de la xunta y el ayuntamiento...lo complicado que me parecía las ayudas a domicilio del ayto y las de dependencia... había miles de recursos (o eso pensaba) que se me escapaban de las manos. Recuerdo aquel señor que "sudaba de la impotencia por tanta explicación",el mismo que cenó con Carolina Herrera, el mismo que un día te gritaba y después te decía "perdón mi neniña"... , recuerdo aquel niño que estaba perdido en su vida, estábamos en un despacho de su instituto, hablamos de amigos,de la vida,del futuro,de las esperanzas,de la oportunidad qué teníamos de ser quién queramos ser...me encantó. Recuerdo al que decía ser el líder de los gitanos, tan sólo 5 minutos para venderte su cultura, "un hombre de muchos contactos",como el decía, pero con tanto genio, que sus broncas con Smara llegaron a ser un pasatiempo para mi. Recuerdo también al negrito encantador que un día vino enfadado,recuerdo cómo trató a aquella gitana,mujer que en ese instante me robó el corazón.Cómo podía ser que una señora como ella,con una movilidad tan reducida,sacase su vida adelante sola, aguantase las palizas y el carácter de su marido, cuidase de un niño con el Síndrome de West y de 6 hijos más,ella,con manos en forma de garras, era todo un ejemplo de superación.Y su niña,"Mi Gitana"...era uno de los momentos más felices,sentarme a su lado y buscar respuestas a preguntas, sonreir mientras borraba toda una palabra porque le faltaba una letra al final, "Esque así aprendo más", recuerdo cuando se me dormía o era incapaz de atender por culpa de las demás.. las conversaciones con ella me encantaban, estaba completamente enamorada, cuantás sonrisas me regalaba, y cuántas veces sonreía yo en silencio mientras la observaba... Recuerdo aquel día que me acompaño por el camino, cómo me contaba los secretos de su cultura, los entresijos de su familia,de su historia... Nada importaba más que ese momento.
Recuerdo también el día con las demás mujeres gitanas, dedicamos la clase entera a preguntarles miles de curiosidades que tenía yo por sus tradiciones, ellas estaban como niñas explicándome y contándome cada detalle...un intercambio de valores y pensamientos increíble.
Recuerdo el día que aquella mujer que había venido tantas veces salió llorando tanto del despacho... cómo dolía a veces este trabajo.
Y fueron tantos los casos,tantas las personas que llenaban de lágrimas esas cuatro paredes,y fue tanto el esfuerzo por hacerles sonreir,aunque fuese por un instante... Pero tan sólo por ese momento valía la pena estar ahí sentada.
He conocido vidas que no podía imaginarme que existieran, situaciones que parecen insostenibles, imposibles de soportar, he visto sonrisas en los más necesitados, he visto vidas que cambiaron en 180º para desvanecerse. He visto personas sin salida a las que no se les quitaba la sonrisa...
Cuánto he aprendido de cada uno de ellos.
Y no olvidaré tampoco a Carlos, a su lado era imposible trabajar, se pasaban las horas hablando de experiencias,de viajes...pero también era el primero que se sentaba a mi lado y me ayudaba con la memoria!
La carita de Paloma,tan inocente y feliz... Y a mi granadina! qué digo! de Salobreña! cómo me gustaba escuchar sus historias,que me llamase "mi niña" o "mi negra", que me hablase de Su niño,y me sintiese como una sureña..
Es tanto todo lo que he aprendido,todo lo que me ha aportado,todo aquello que he vivido en estos 4 meses..
Experiencias que te llenan de vida.
Experiencias que no quieres que acaben nunca.
Experiencias que te hacen olvidar tu vida por un momento,y valorarla después.
Experiencia que hoy llega a su fin.
lunes, 7 de junio de 2010
lunes, 19 de abril de 2010
Odiando cada 19 de Abril

Hace unos días soñé contigo, caminaba cabizbaja,indecisa,triste.Entonces levanté la mirada,ahí estabas tú,parada frente a mi,y yo,con el temblor de mis manos te miré,quieta,en silencio,sentí miedo.Pero entonces no tuve tiempo a pensar lo que estaba sucediendo,corrí hacia ti refugiándome en tu abrazo,tan fuerte que todavía puedo notarlo.
Suena Rosana,me gusta escucharla cuando pienso en ti,en tu casa siempre estaba de fondo El talismán..Tiene una canción nueva,"Llegaremos a tiempo",estoy segura que si la escuchases sería una de tus favoritas,y sabes qué? me gusta subir el volumen cuando suena,me gusta pensar que quizás desde algún lugar tú me la cantas y yo te sigo,cantamos lo más alto posible,juntas,es entonces cuando la vida parece colorearse.Tampoco me olvido de las horas de viaje en coche, cuando cantábamos la historia de aquel gigante que nunca se levantaba de la cama! cómo me gustaban esos momentos. Recuerdo cada una de las miles de cucharas que coleccionabas de diferentes ciudades,países...nunca dejaron de impesionarme! Sigo siendo aquella niña que espera cada mañana frente al espejo alguién que le haga trenzas en el pelo.Todavía puedo recordar el olor a buñuelos recien hechos,o al bizcocho de dos colores que se fundían entre sí. Me gusta también el olor a campo,siempre revivo la sensación de correr mientras tú me miras y sonríes,de buscar flores,mariquitas,caracoles y hacerles contigo una casita de cartón,de columpiarme y mostrarte lo alto que podía llegar,siempre decía que un día llegaría a volar. Cada noche de verano miro a las estrellas,recuerdo la historia del castillo y la princesa,sigue viajando en su estrella fugaz.Recuerdo el sonido de las olas y tus brazos protegiéndome del viento. Recuerdo el miedo que me daban las montañas rusas,cómo te suplicaba que me agarrases fuerte,tú siempre decías que no tuviese miedo,estabas a mi lado,no me soltarías.Las noches en París jugado con un yo-yo,los desayunos de hotel con tostadas zumo y mermelada,lo alto de la Torre Eiffel y el mundo a nuestros pies. Qué malita me puse aquel día,cómo me cuidaste tú.
Me gusta pensar que estás ahí,que estás a mi lado,que me cuidas allá donde vaya,hace que todo me de menos miedo.
A veces siento que me estoy fallando,no sé hasta qué punto estarás orgullosa de mi,el primer día de prácticas me acorde d ti,ojalá pudiera encontrar tu mirada el día que un título me nombre Trabajadora Social,parece que era ayer cuando observaba a tus alumnos de universidad,qué mayores me parecían!
A veces me gustaría preguntarte que harías si volvieras de nuevo a la vida,cuántas cosas cambiarías,de qué forma la vivirías,quizás necesite tu respuesta para encontrar la mia.
Odio cada 19 de Abril.
martes, 9 de marzo de 2010
Caos
Es difícil escribir cuando no estas seguro de lo qué contar,cuando el mundo sigue girando a pasos agigantados y tú te encuentras en un instante que parece eterno,parece que no acaba nunca,intentas aferrarte a un gesto,una mirada,una complicidad que te haga recordar tu camino,seguir a la velocidad establecida y no perder un segundo más esperando que pase algo,cuando sólo te pasa la vida.
Diría que después de esta semana, he aprendido a ser todavía más observadora. Escucho detenidamente cada palabra, sigo cada milímetro de piel trazado que recorren las lágrimas de quién llora, cuento las veces que suena el chasquido de sus dedos, el temblor de sus piernas y cada uno de sus movimientos. En silencio, siempre en silencio.
Cada mañana dejo parte de mi vida a un lado para ser quién tengo que ser en el sitio donde estoy, procuro olvidarme de aquello que me rodea y centrarme en ese momento, en el aquí y ahora. Pero las manecillas nunca dejan de correr, es entonces, cuando recogo el abrigo y enredo mis manos entre los hilos de la bufanda, cuando observo mi mundo,mi propia vida y quienes la forman girar. Y a veces siento que todo lo que yo creía tener se va desvaneciendo poco a poco, que quizás hayá que subirse al próximo tren sin echar la vista atrás, que cada uno va siguiendo su camino, unos te agarran más fuerte de la mano, otros comienza a soltarse. Me gusta pensar que cuando no logramos encontrar nuestros sueños, tenemos que seguir buscando, porque en algún lugar habrá lugar para ellos. Al fin y al cabo,son etapas de la vida. Recuerdo que este verano me encontré con una profesora, me hablaba del momento en qué termino la carrera, "la peor época de mi vida" decía.
Es una sensación de satisfacción, lo has conseguido, has alcanzado tu meta. Es una sensación de vacío, ¿y ahora,qué? . Ya no sirve mirar a los demás y planear, no, te encuentras tú y nadie más con miles de puertas que no quieres ver, no sabes dónde esta tu camino para seguir,dónde estan los que estuvieron y ahora parecen no estar, dónde tienes tus nuevos zapatos para echar a correr hacia cualquier dirección, no sabes dónde está cualquier dirección. Todo parece demoronarse.
Y tú,tú no te encuentras.
Diría que después de esta semana, he aprendido a ser todavía más observadora. Escucho detenidamente cada palabra, sigo cada milímetro de piel trazado que recorren las lágrimas de quién llora, cuento las veces que suena el chasquido de sus dedos, el temblor de sus piernas y cada uno de sus movimientos. En silencio, siempre en silencio.
Cada mañana dejo parte de mi vida a un lado para ser quién tengo que ser en el sitio donde estoy, procuro olvidarme de aquello que me rodea y centrarme en ese momento, en el aquí y ahora. Pero las manecillas nunca dejan de correr, es entonces, cuando recogo el abrigo y enredo mis manos entre los hilos de la bufanda, cuando observo mi mundo,mi propia vida y quienes la forman girar. Y a veces siento que todo lo que yo creía tener se va desvaneciendo poco a poco, que quizás hayá que subirse al próximo tren sin echar la vista atrás, que cada uno va siguiendo su camino, unos te agarran más fuerte de la mano, otros comienza a soltarse. Me gusta pensar que cuando no logramos encontrar nuestros sueños, tenemos que seguir buscando, porque en algún lugar habrá lugar para ellos. Al fin y al cabo,son etapas de la vida. Recuerdo que este verano me encontré con una profesora, me hablaba del momento en qué termino la carrera, "la peor época de mi vida" decía.
Es una sensación de satisfacción, lo has conseguido, has alcanzado tu meta. Es una sensación de vacío, ¿y ahora,qué? . Ya no sirve mirar a los demás y planear, no, te encuentras tú y nadie más con miles de puertas que no quieres ver, no sabes dónde esta tu camino para seguir,dónde estan los que estuvieron y ahora parecen no estar, dónde tienes tus nuevos zapatos para echar a correr hacia cualquier dirección, no sabes dónde está cualquier dirección. Todo parece demoronarse.
Y tú,tú no te encuentras.
viernes, 5 de marzo de 2010
Buscando un poco de color

Papeles.Tramitaciones.Solicitudes.Certificados.Firmas.Direcciones.
Apellidos.Nombres. Personas.
Ultimamente me he preguntado cuánto de humano tiene sentarse tras una mesa, escuchar con desgana , rellenar unos papeles y desentenderte. Quizás algún día sea así,quizás sólo sea la inocencia de quién empieza, la idealización de lo estudiado o quién sabe si una futura reivindicación o, quizás, una auténtica vocación.
Todas las mañanas me encuentro con palabras de desesperación, llantos desconsolados, punzadas que tejen vidas, pieles arrugadas de dolor, manos marcadas por el intento desquiciado de buscar un único suspiro de esperanza.
A veces me pregunto cuántas noches soñarían con una vida mejor, cuántas veces se imaginarían protagonistas de una vida sin deudas, de salir a tomar un café sin preocuparse de un euro con diez céntimos,comprarse el periódico y saber leerlo,un plato caliente de spaghettis recién hechos, unos hijos que puedan disfrutar de juguetes nuevos y crezcan envueltos en sonrisas,caricias... un diciembre sin preguntarse cómo será la navidad tras esas ventanas adornadas y llenas de luz. Pero es entonces cuando despiertan, y su realidad comienza a golpear ferozmente,comienza un día más la lucha por una vida digna.
Crecí pensando que siempre había un lugar para los sueños, tantas hojas en blanco como personas en el mundo, para que todos seamos libres de escribir nuestra propia historia,de vivir lo que soñamos.
Es entonces cuando de lejos,escucho su realidad.
[- ¿Qué escribes?
-Una carta a los reyes magos.
-¿Y qué les pones?
-Que nos devuelvan la vida. ]
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